Los procesos educativos que involucran tecnologías en general y digitales en particular, proponen formas específicas de mediación y mediatización de la relación educativa entre los actores del proceso de enseñanza y de aprendizaje y de ellos con los distintos elementos del transcurrir didáctico con referencia a modelos pedagógicos específicos.

Son formas en las que se crean las condiciones -simbólicas y materiales- para enseñar y aprender, en el marco de un modelo pedagógico y didáctico específico generado y/o seleccionado en función de metas político-institucionales.

Esta mediación didáctica, al incorporar las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones, implica un proceso de mediatización, es decir, un proceso de selección y utilización de una gran variedad de recursos y herramientas que al incorporarlas potencian y profundizan el proceso didáctico dentro del marco pedagógico desarrollado. 

De este modo, un proceso educativo que articule con recursos y herramientas potentes tecnológica y didácticamente supone la inclusión y/o articulación de ambientes de aprendizaje, reales y virtuales, espacios donde los docentes desarrollan estrategias de enseñanza que faciliten el aprendizaje de los estudiantes y la enseñanza de los docentes.